Las maderas en el Golf

¡Aumenta la emoción.......he tirado con maderas!

Os voy a intentar explicar cómo funciona esto de los palos en golf. Todos, en conjunto, se llaman palos. Pero, aquí está el meollo del asunto, las maderas se utilizan para los golpes largos. La madera que llamamos driver es la número 1 y la utilizamos para el golpe de salida del hoyo. Tiene algunas ventajas: le podemos imprimir a la bola un efecto lateral y conseguir más de 200 metros. Las maderas número 3 y número 5 se suelen utilizar cuando estamos jugando en la calle (y no en el punto de salida). La madera 7 se utiliza, sobre todo, para las zonas de hierba alta.

También he aprendido que el tee es necesario para lanzar con las maderas. El tee es un soporte que lo colocamos pinchado en la hierba para que la bola quede un poco más alta del nivel del suelo. Y en mis propias carnes he descubierto que sin el tee un mal golpe puede hacer que los brazos y las muñecas se resientan porque has realizado un mal swing.

Los drivers se diferencian por los centímetros cúbicos de su cabeza que suelen ser grandes y redondeadas.  Están fabricadas de titanio o de acero. Los grados de loft se refiere al ángulo de la cara del palo con respecto a la vertical. Este ángulo nos indicará, valga la redundancia, el ángulo en el que la pelota va a salir cuando la golpeemos. Para empezar se recomienda de 10 a 11 grados para conseguir una trayectoria más alta pero no llegaremos a conseguir muchos metros de distancia.

Golpe en el golf denominado pitch

El día de hoy lo hemos dedicado al golpe que se denomina pitch. El pitch consiste en un golpe corto y alto. El objetivo es que la bola se quede lo más muerta posible cuando da en el suelo después de haber hecho un vuelo. Este golpe nos ayudará a salvar obstáculos: rough (matorral), bunker (arena), agua, etc.

Tenemos que dar con el palo en la parte baja de la bola para que se eleve. El palo tiene que estar más abierto que en un golpe estandar. Y el peso lo cargamos sobre la pierna izquierda. A mi me viene bien abrir el pie izquierdo para conseguir mejor posición frente a encarar este golpe.

Guantes de Golf

La cosa avanza. Hemos practicado en el campo de pruebas todo el recorrido del swing. A veces sale y muchas más no sale. Pero si consigues un buen golpe compensa por 10 malos. Espero mejorar poco a poco.

El otro día salimos al campo real. Un lujo, el sol en la cara, los pájaros cantando y ahí estaba yo con mi palo.

Estrenaba guante porque había sufrido algún resbalón y las rozaduras en el lado izquierdo de la palma de la mano me estaban molestando. Tuve que comprarme uno y sumergirme en el mundo de los guantes de golf.

Hay que elegir un guante que se nos adapte como una segunda piel, lo más ajustado posible, porque con el paso de las jornadas de golf se irá ensanchando un poco. Personalmente me he comprado un guante de piel sintética que me permite más ventilación y una correcta transpiración. Soy diestro y por eso tengo guante en la mano izquierda y si fuera siniestro además de "bailar sobre tu tumba" llevaría el guante en la mano derecha porque soy zurdo. Existen guantes de piel de vaca y de cabrito (estos últimos son los más aceptados por los profesionales). Pero ahora viene lo importante, el desgaste del guante nos va a proporcionar las pistas para corregir nuestros errores durante el swing. Lo ideal es que el guante se desgaste todo por igual y eso significa que durante todo el swing tenemos o adoptamos la postura correcta. No perdamos de vista que siempre sujetaremos más el palo con los dedos que con el resto de la mano. Si notamos que se desgasta por la zona de la palma de la mano cerca del pulgar eso significará que el grip de nuestro palo no es el correcto, será más pequeño de lo que necesitemos. El desgaste de la zona cercana a nuestra muñeca nos indicará que el palo se mueve durante el recorrido de nuestro swing y eso debemos de corregirlo.

Por último, comentar que hay que guardar el guante estirado para que no adquiera arrugas y tenerlo siempre limpio. Si va a ser nuestra segunda piel pensemos que no llevamos las manos sucias habitualmente.